El objetivo de la centrifugación es separar sólidos insolubles (de partículas muy pequeñas, difíciles de sedimentar) de un liquido. Para ello, se aplica un fuerte campo centrífugo, con lo cual las partículas tenderán a desplazarse a través del medio en el que se encuentren con la aceleración G.
E = velocidad angular2 x radio de giro.